-Los Yukpas que se encuentran asentados en el distribuidor Perijá ya no venden artesanías, ni piden dinero a quienes transitan por el lugar. La venta ilegal de gasolina, o bachaqueo, se presentó para ellos como un negocio más lucrativo.
Un acceso vehicular permite a los interesados ‘tanquear’ dentro del asentamiento indígena; otros conductores estacionan a lo largo de la vía y hasta allí llegan los vendedores, con pimpinas en mano, para cerrar el negocio. Dos dólares por litro es el precio de venta.

Muchos automovilistas prefieren acudir a esta alternativa improvisada e insegura, antes que hacer las largas colas que reaparecieron recientemente en las gasolineras de la capital zuliana.
Los Yukpas y el bachaqueo de gasolina en tiempos de escasez
Adultos, adolescentes y niños de la etnia Yukpa, participan en la atención a los clientes; las mujeres de la comunidad, la mayor parte del tiempo, se encargan de las labores domésticas.

En los últimos días, varias estaciones de servicio permanecen cerradas, generando incertidumbre en la población.
Además, sigue latente el tema referido a la calidad del combustible que se está vendiendo en la entidad, lo cual habría provocado daños a algunos componentes de los automotores y que, al menos, veintiséis vehículos se hayan incendiado en lo que va de año, según reporte de los Bomberos de Maracaibo.


Lee también: Bachaqueros en acción: Se asoma la escasez de gasolina y reaparecieron
F Reyes
Fotos / Videos: José López Linares
Noticia al Día