Domingo 14 de diciembre de 2025
Al Dia

Rodolfo Araujo mantiene viva la tradición familiar del Pesebre desde hace 60 años en La Trinidad

Rodolfo Araujo, artesano marabino con una profunda herencia familiar, mantiene viva una tradición de seis décadas al construir pesebres en el porche de su casa en la urbanización La Trinidad, en la zona norte de la capital zuliana que son únicos, espectaculares y llenos de colorido, utilizando exclusivamente material reciclado.

Rodolfo Araujo mantiene viva la tradición familiar del Pesebre desde hace 60 años en La Trinidad
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Rodolfo Araujo, artesano marabino con una profunda herencia familiar, mantiene viva una tradición de seis décadas al construir pesebres navideños únicos, espectaculares y llenos de colorido, utilizando exclusivamente material reciclado.

Esta costumbre, iniciada por su padre al llegar a Maracaibo desde Caracas, ha evolucionado de un humilde montaje en el patio a una deslumbrante exhibición en el porche de su casa.

La tradición comenzó hace 60 años con su progenitor, quien inculcó en la familia el arte de armar el nacimiento. Tras la muerte de su padre, Araujo retomó la tarea con una visión renovada.

Imagen: Arelys Munda

Tras un período de siete años en Colombia, regresó al país e impulsó el proyecto en 2009, dándole una nueva vida, una mejor planificación y un enfoque artístico que lo diferencia.

Un legado de fe y creatividad

El valor añadido del trabajo de Araujo reside en su compromiso con la sostenibilidad. Aprovechando sus habilidades como carpintero, tapicero, ebanista y restaurador de piezas, el artista transforma desechos cotidianos en escenografías detalladas.

Rodolfo Araujo / Imagen: Arelys Munda

Entre los materiales que utiliza se encuentran cajones de computadoras, la parte superior de microondas, chapas de madera, lajas, piedritas, alambres cortados y cola blanca.

"A pesar de que el pesebre se me ha quemado dos veces, la fe en el Niño Jesús y el compromiso con esta tradición familiar me mantienen en pie", afirma Rodolfo Araujo. "Todos los años me esfuerzo por hacerlo diferente. Comencé el trabajo de este año en marzo, asegurándome de que cada montaje sea una pieza de arte única y nueva, que mantenga viva la esencia de la Navidad."

Imagen: Arelys Munda

La pasión de Araujo trasciende Maracaibo, ya que también mantiene un pesebre en Barranquilla que cuenta con 45 años de historia. Su resiliencia es evidente: a pesar de los contratiempos, su fe y su arte lo impulsan a mantener viva la tradición, haciendo de sus pesebres no solo una decoración navideña, sino un testamento de creatividad, fe y legado familiar.

Noticia Al Dia / Arelys Munda

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