-Si al estar en la calle uno escucha de pronto que llaman a un niño Neymar o en una consulta médica citan a Ashlan (el león de Las Crónicas de Narnia), aunque parezca increíble estos son algunos nombres escogidos por las nuevas generaciones de padres en Maracaibo para de algún modo engrandecer a sus hijos, tanto como a un astro de fútbol o el héroe de la película que tanto le gustó o simplemente convertirlo en el “sin tocayo”.
Cortos, largos, extraños y hasta combinaciones difíciles de leer, resultan ser los nombres que a diario reciben en cada registro civil de las 18 parroquias marabinas los que solicitan el bautismo en el caso de presentar niños.
Pero en realidad lo que nos ocupa en este momento son los nombres que los maracuchos le colocan a los barrios que conforman en terrenos que invaden y que con el tiempo convierten en lugares netamente urbanos con el mote que inicialmente colocaron. Son muchos los sectores de la ciudad que los tienen estrambóticos y hasta vulgares que causan extrañeza y risa al visitante.
La identificación que los maracuchos colocan a sus barriadas al momento en que deciden fundarlas o un determinado sector que desean resaltar dentro de las existentes, muchas veces pueden resultar hasta contradictorios. Para los vecinos de Santa Lucía y sector Bella Vista, resulta incomprensible por ejemplo, que en Maracaibo con temperaturas por encima de los 50 grados exista un sector llamado Valle Frío.
Algunos barrios conocidos como El Hediondito, que debe su nombre a las aguas negras que corrían por sus arenosas calles cuando fue fundado. Los Sufridos, que sus habitantes lo pusieron así porque dicen que pasaron las de "Caín", "para poder fundarlo y El Último Peo que debe su nombre a lo lejos de su ubicación. Barrio La Lechuga fue bautizado por la cantidad de monte y maleza que tuvieron que quitar para construir las casas y Siete Cojones, un barrio donde se impuso la ley por cuenta de sus habitantes para poder fundarlo, entre otros registrados.
Hay un barrio que se llama El Museo y recibe ese nombre porque desde que nació era visitado por artistas plásticos y se quedó con ese nombre. El Hornito, un barrio que hace su nombre a la temperatura que resisten los zulianos.
Otra barriada muy popular es Arca de Noé, dicen que obedece su nombre a un pasaje bíblico y por la cantidad de personas que ahí viven y practican la religión evangélica. El barrio Los Planazos tomó su popularidad por la actuación de la Guardia Nacional cuando pretendió desalojarlos y repartió planazos, golpes y peinillazos.
Para nadie resulta extraño que un sector sea conocido como Los Cachos y sus fundadores dicen que se debe a que los primeros que invadieron las tierras fueron hombres y mujeres que dejaron sus parejas por ser infiel.
La mayoría de los estrafalarios y pintorescos nombres son utilizados por sus habitantes sin problema alguno. Existe un barrio que se llama Los Andes porque de los primeros habitantes que llegaron ahí venían del estado Trujillo. Contó la señora Perla Muñoz que ella recuerda que existían cuatro hermanos que se llamaban, Protón, Electrón, Neutrón, Tritón.
Políticos, esposas de presidentes de la República, artistas famosos, universidades, personalidades, deportistas famosos entre muchos otros tienen sus barriadas en la ciudad capital del Zulia. Felipe Pirela, Torito Fernández, Guanipa Matos, Teotiste de Gallegos, Royal; Universidad; Venezuela; Zulia; Bella Vista; Bello Monte; Betulio González; Bicentenario Sur; Blanca Blanca Ibáñez, Terepaima.
Los nombres populares que otrora le designaba el pueblo a sus barrios, calles y callejones de la ciudad forman parte de la rica estampa maracaibera del pasado que tienen sus raíces en la viveza e ingenio de su gente y por tanto no son nombres designados por las autoridades para la nomenclatura oficial, pero si forman parte, dentro del rico folclore zuliano, de la idiosincrasia del maracaibero.
Pocos de esos nombres tan peculiares se deben a alguna leyenda o tradición histórica que revisten cierta importancia. La mayoría tiene su origen en los más diversos motivos e insignificantes hechos.
Nombres a las calles
Así como le colocan nombres muy particulares a las barriadas donde habitan, de igual forman lo hacen con calles, callejones o cualquier paso que le sirva para comunicarse de un sector a otro.
Son nombres populares que los mismos ciudadanos le asignaban a las calles donde residen. No son escogidos por simple capricho o por una imaginación sin fundamento, sino que tienen una razón de ser y en su escogencia, juegan un papel muy importante varios factores, tales como la jocosidad, la creatividad o la misma idiosincrasia del marabino.
Lo cierto es, que estos nombres desde el primer momento en que le fueron asignados a ciertas calles de Maracaibo tienen un fundamento racional. El Callejón de los Miaos, Calle La Mona, Calle Los Sapos, La Mochila, Callejón de los Pobres, que se extiende por un largo trecho de lo que es la avenida Páez. Su nombre se originó cuando un grupo de comerciantes informales tomará la avenida desde el lugar donde se encuentra el antiguo templo de San Felipe hasta el antiguo Paseo Colón.
NAD