Los miembros de la etnia Yukpa necesitan, de una manera u otra, garantizar el sustento de sus familias. Aseguran que esa es la razón de su lucha. Así lo escuchamos de Ismenia García, miembro de la organización de mujeres indígenas yukpa Oripanto Opayapo Tüonde, conformado por defensoras del territorio de la cuenca del río Yaza de la Sierra de Perijá.
La compra regular de artesanía Yukpa por parte del Gobierno Nacional, fue un compromiso asumido por la ministra de Pueblos Indígenas, Clara Vidal. Sin embargo, luego de una primera compra a principios de año, no hubo otras, tal como se habría acordado.
De esa primera transacción no se beneficiaron todos los artesanos y tampoco existe claridad de cuánto fue el monto que se manejó, ya que algunos recibieron pago en bolívares y otros vía transferencia.
Se desconocieron los liderazgos
Para materializar el acuerdo de compra – venta de las artesanías se nombró a cuatro responsables, pero no se hicieron las consultas requeridas y se desconoció tanto a los liderazgos como a los caciques mayores, derivando en “opiniones, acciones y reacciones encontradas dentro del territorio de la Sierra de Perijá”, revela un comunicado de Oripanto.
En palabras de Ismenia García, las ganancias derivadas de la venta de la artesanía permitirían aliviar algunos de los problemas urgentes que aquejan a sus comunidades.
“Nosotros queremos vender las artesanías en Caracas, pero no nos han permitido llegar hasta allá. Con esa venta podemos lograr el dinero necesario para beneficiar a la comunidad. Comprar transformadores, medicinas, alimentos… no es como han estado diciendo”, sostiene.
"Nos limitan el libre tránsito"
Los Yukpas exigen que se honre la palabra empeñada, por lo cual decidieron viajar a Caracas a buscar una respuesta, lo cual se les ha impedido, de forma reiterada. De allí que se apostaran en la cabecera occidental del Puente sobre el Lago, obstaculizando el paso vehicular durante dos días.
Los artesanos exigen la intervención directa del presidente Nicolás Maduro, para lograr el cese de “la violencia, discriminación y estigmatización que se han propiciado de manera escalonada, exponencial y peligrosa”, especialmente en el Zulia. Esto, según el documento suscrito por las integrantes de Oripanto.
Los Yukpas reclaman, además, que se respete su derecho al libre tránsito, como ciudadanos venezolanos. ¿En qué parte de la Constitución dice que no podemos desplazarnos libremente en el territorio nacional?, se preguntan.
Entre algunos hechos lamentables que refieren, está una confrontación el pasado 29 de marzo cuando un grupo de Yukpas que se encontraba en Valencia, con destino hacia Caracas, fue repelido con bombas lacrimógenas por fuerzas de seguridad.
"Necesitamos que arreglen la vialidad de la Sierra de Perijá": clamor del pueblo Yukpa
Hay malestar en el seno del pueblo Yukpa porque consideran que les están discriminando, negando sus derechos y dejando sin alternativas para sobrevivir.
Ismenia señaló que el arreglo de la vialidad en la Sierra de Perijá es un clamor que por 20 años no ha encontrado respuesta. “… Porque la producción se está perdiendo, no hay como sacarla. Tampoco podemos trasladar a los enfermos a los hospitales… Necesitamos trabajar, producir y tener dinero para mantener a nuestros niños, comprar alimentos, medicinas, lo que necesitemos…”
En las protestas recientes están representadas varias comunidades Yukpas que habitan la Sierra de Perijá, pero hasta el momento parece que no sale humo blanco. “No hay acuerdo. Del Gobierno dicen que ya no van a comprar más, otros dicen que sí ¿Quién los entiende?”, expresa Ismenia García.
En el comunicado del pasado 12 de junio, Oripanto hizo un llamado al orden en toda esta situación, considerando que la vida distintas personas indígenas y no indígenas está en riesgo.
Proponen reunión en la Asamblea Nacional
En aras de una solución, solicitan que las mujeres Yukpa sean escuchadas por el Parlamento nacional, en una delegación de la cual forme parte la diputada Asia Villegas, de la Comisión Permanente de las Familias, Libertad de Religión y de Cultos.
Ismenia García, María Teresa Yasphe y Reina Ubirichi, voceras de Oripanto, deberían ir a esa reunión, acompañadas de tres mujeres más, “a fin de explicar todo lo que han vivido y sus propuestas en relación con la venta de la artesanía y otras situaciones que aún no fueron resueltas”.
“No dejamos esta selección en manos del Ministerio de Pueblos Indígenas porque no se puede ser parte y juez de un conflicto que no se ha manejado correctamente y evidencia de ello, es el nivel de desacuerdo que hoy está presente, de conocimiento público y notorio”, señaló la organización.
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F Reyes
Noticia al Día