La Chinita llegó a Valmore Rodríguez por vía lacustre, desatando una jornada de fe, música y tradición mariana

Con el acompañamiento musical de los Vasallos de San Benito “La Familia”, la réplica de la Virgen del Rosario de Chiquinquirá, patrona espiritual del Zulia, arribó este martes 4 de noviembre de 2025 al municipio Valmore Rodríguez, en la Costa Oriental del Lago, generando una profunda manifestación de fe entre los devotos.

La imagen llegó por vía lacustre, modalidad que resalta la conexión histórica y espiritual entre el Lago de Maracaibo y los municipios costeros. Desde tempranas horas, la feligresía se congregó en el antiguo muelle II de Pdvsa, conocido como Costa Bolívar, para recibirla entre cantos, oraciones y expresiones de gratitud.

La réplica, proveniente del municipio Lagunillas, fue recibida oficialmente por el padre José Juan Reinoso, párroco de la Iglesia Virgen de Fátima, quien calificó el encuentro como “una jornada de esperanza y devoción”. Reinoso destacó que “la gente busca a la Virgen por todos los milagros concebidos” y reafirmó su compromiso de fortalecer la devoción mariana como parte de la identidad valmorense.

La procesión contó con la presencia de autoridades locales, entre ellas representantes de la Alcaldía Bolivariana de Valmore Rodríguez, el coronel Alvarado Martínez del CEFIE, y la sargento ayudante Nerza Castellanos de la GNB, quienes acompañaron el recorrido junto a la comunidad.

Durante la visita número 20 de la Chinita al municipio, también se hicieron presentes representantes del Ministerio del Poder Popular para la Educación, encabezados por el profesor Ender Castillo, quienes expresaron su amor y respeto por la Virgen Morena.

Por su parte, María Pino, gerente de Desarrollo Social, en nombre de la alcaldesa Yurani Pino, dio la bienvenida a la patrona zuliana con palabras de fe: “Hoy le damos la bienvenida a nuestra patrona para que nos siga iluminando y guiando”.

La jornada reafirma el valor de las tradiciones marianas en la Costa Oriental del Lago, donde cada año cientos de familias se reúnen para pagar promesas, pedir favores y renovar su fe en la Virgen de Chiquinquirá.