En Maracaibo, el sol no da tregua. La ciudad se enfrenta a un calor sofocante, con temperaturas que alcanzan los 35 grados Celsius y una alta humedad que agobia a sus habitantes. Esta ola de calor obliga a muchos a resguardarse y a mantenerse hidratados para combatir los efectos del clima.
A pesar del sol inclemente, la vida en la ciudad no se detiene. Muchos marabinos deben salir a hacer sus diligencias, incluso en las horas del mediodía, cuando se registran las temperaturas más altas. Para enfrentar este clima extremo, las personas se arman con paraguas, gorras y pañuelos para secarse el sudor, buscando refugio en cualquier espacio de sombra disponible.
Aunque el calor afecta a todos, las personas mayores y las que tienen sobrepeso son las más vulnerables a exponerse al sol. Por ello, se recomienda a estos grupos tener especial precaución y evitar la exposición directa durante las horas pico de calor.
Noticia al Día/ Reyhans Quiroz