Elvis Sanabria: "Dios y el apoyo de mis hijos me dan la fuerza

-La vida de Elvis Sanabria dio un giro inesperado hace tres años cuando un accidente le produjo la perdida de sus cuatro extremidades. Un duro golpe para él, su esposa y sus ocho hijos.

Elvis pudo haber dado todo por perdido, sin embargo, su pensamiento fue otro, decidió salir adelante por amor a sus hijos y está seguro que si Dios le dio una segunda oportunidad de vivir, es porque tiene una misión que cumplir.

Siempre hemos escuchado que papá todo lo puede, papá siempre está ahí para rescatarnos y Elvis no es la excepción. Pese a su discapacidad, él sigue velando por el bienestar de sus hijos; el amor que tiene por ellos fue lo que no le permitió caer, por el contrario, es su impulso para salir adelante día a día.

Aun cuando, de momento, no puede ser el proveedor para sus hijos, Elvis se mantiene al frente de la familia con su ejemplo de valentía, con el consejo oportuno y el acompañamiento en cada etapa de la vida de ellos.

En conversación con Noticia al Día, nos confesó cómo ve la convivencia familiar en esta etapa que les ha tocado vivir. "Pienso que estoy recuperando el tiempo por aquellas veces que, debido al trabajo o circunstancias, no estuve para ellos (…) Muchas veces me tocó trabajar en el interior del país por varias semanas y hasta meses".

"A pesar de mi discapacidad, quiero compartir el mayor tiempo posible con mis hijos", agregó Elvis.

Elvis lamenta no poder abrazar a su hija menor, Valeria Sanabria, que tan solo tenía dos meses cuando ocurrió aquel hecho; actualmente tiene tres años y es su princesa.

Padre trabajador y responsable

Desde los 15 años, Elvis ha sido un hombre trabajador, padre ejemplar. Antes del accidente no le faltaba trabajo, ya que aprendía todo para que a sus hijos no le faltara nada.

Fue sepulturero, construyó pozos, trabajó en la cría de ganado, como reparador de televisión, neveras, aires acondicionados y todo lo que se le atravesaba con tal de tener más fuentes de ingreso.

Un padre digno de admirar, que está con sus hijos y que confirma la responsabilidad de estar presente en sus vidas, más allá de todo. "Trato de que aprendan cosas todos los días, para que puedan resolver en cualquier circunstancia", señaló Elvis.

"Los ayudo en lo que puedo con sus tareas escolares, ellos me apoyan al momento de hacer mis ejercicios; les enseño a utilizar herramientas para que aprendan a reparar cualquier artefacto, de hecho, ya han aprendido mucho".

El señor Sanabria se ingenió la forma de escribir y jugar juegos de mesa con sus hijos. "A veces nos divertimos mucho, echamos chistes malos, jugamos dominó, bingo y ludo".

Ganas de vivir por sus hijos y porque aún hay cosas pendientes

Aunque la vida ha sido muy dura con Elvis, él está seguro que Dios le dio una misión que cumplir, ya que fue el único de los tres compañeros que sobrevivió de ese trágico accidente.

"Sentí que fue la justicia divina lo que me salvó; hay gente que cree que estoy loco, pero no es así. Vi como la electricidad rebotaba en mi cuerpo. Estar vivo es una bendición, a pesar de mi discapacidad, pero, estoy aprendiendo a caminar de nuevo".

Entre sus objetivos, está que, cuando tenga sus prótesis, ayudar a personas que están pasando por lo mismo y motivarlos a salir adelante ante las adversidades que la vida pueda ponerles.

Sanabria, está punto de cumplir 49 años el próximo mes de julio y a pesar de sus dificultades, toma esta etapa con serenidad y agradece a la vida por seguir compartiendo con sus hijos, que son su mayor apoyo junto a su esposa.

Elvis es un papá que, a pesar de las adversidades, es un ejemplo a seguir, que busca la manera de demostrarles a sus hijos el amor que siente por ellos y que, pese a todo, él seguirá siempre a su lado.