Las autoridades en materia detectivesca de la Policía Científica manejan dos hipótesis en relación a la muerte en extrañas circunstancias de la periodista Mercedes Herrera, cuyo cadáver fue hallado atado de manos y pies, en avanzado estado de descomposición en el interior de su domicilio, ubicado en la urbanización Altamira en la Gran Caracas.
El hallazgo de la infortunada mujer se hizo luego de estar desparecida desde el pasado lunes 30 de septiembre, fecha en la cual dijo a sus familiares que iría al parque nacional Waraira Repano (cerro El Ávila) a trotar un rato. Desde entonces no se supo más sobre su paradero hasta que su cuerpo fue encontrado este jueves, encerrado en una de la habitaciones del inmueble.
Sus parientes, ante la repentina desaparición, este primero de octubre comenzaron a difundir en redes sociales flyers con su foto y la información de su desaparición, indicando que su teléfono celular había aparecido en una parada de autobús en la avenida Francisco de Miranda, cerca de un café que está entre las urbanizaciones Bello Campo y Altamira, según reportó el periodista Román Camacho.
El hecho generó mucha alarma e inmediatamente los familiares acudieron el pasado martes a la sede del CICPC, para denunciar la desaparición de manera oficial y que se iniciaran las investigaciones. Al otro día, los detectives encontraron la macabra escena. Por el momento manejan dos hipótesis: la primera apunta al móvil de robo y la segunda al homicidio intencional.
Tomando en cuenta que las cerraduras de las puertas y ventanas de la casa no fueron violentadas ni tampoco había desorden en el lugar, las autoridades sostienen que alguien muy cercano a la periodista la mató. Por otra parte, podría tratarse de un robo y los ladrones sabían exactamente lo que iban a hacer, interceptando a la mujer cuando, presuntamente, salió de su residencia a trotar en El Ávila.
Hasta el momento se desconoce la causa de muerte, aun cuando el cuerpo de Mercedes Herrera fue trasladado a la sede del Senamecf donde se realizará la necropsia de ley. Amigos y familiares aseguran que la periodista no pudo salir de su casa para ir a El Ávila a ejercitarse, porque era una persona muy conocida en la zona y nadie reportó haberla visto por el área.
Noticia al Día / Con información de Román Camacho