Este puente es un tesoro arquitectónico ´´escondido´´ en la ciudad de Maracaibo, de gran valor cultural patrimonial – histórico. Es una de las entradas para el tradicional sector de Santa Lucia, al final de la calle Federación hacia la avenida Padilla
A pocos metros se ve el centenario hospital Central y a su lado la Iglesia Santa Ana. Por la avenida Padilla, unos parroquianos en carreta tirada por un burro, llevan todo tipo de chatarra, piezas de metal que compran o toman en basureros a lo largo del camino . "Compramos hierro, jergones, aires viejos, piezas de carros, puertas de hierro, rejas en desuso, neveras viejas, tv ", se escucha desde una grabación al paso del carruaje por la vía principal. Un joven estimula la bestia para atravesar la vía mirando de ´´reojo´´ la joya arquitectónica.
Un joven trajeado con braga de caqui baja de la destartalada carreta y se dirige a la calle Federación para tomar el conocido puente O’ leary , el que aún tiene sus láminas de acero atornilladas y a pesar de los años deja pasar sin dificultad, las aguas de desechos de la cañada Federación que van hacia el lago. Una estructura de acero que se mantiene intocable desde un tornillo.
Sus perfiles son una obra del ingeniero belga León Höet, que sigue en pie, limitando el populoso barrio Santa Lucía al final de la calle La Federación, saliendo hacia la Avenida Padilla .
En los libros sobre la tradición de Maracaibo aparece esta estructura de hierro como un ícono que se levantó en la zona céntrica de la ciudad cuando el modernismo de la época llegaba con el avance urbano de otras partes del mundo.
Podría consagrarse como una de las estructuras más antiguas de la capital zuliana, levantado en el año 1907. Se le conoció como ´´El Puente Lares´´ en homenaje al gobernador del estado Zulia de aquel entonces, (José Ignacio Lares Baralt). El responsable de su construcción fue el ingeniero belga, León Höet, quien también fue el arquitecto del Teatro Baralt.
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Años más tarde quedó inaugurado como ´´Puente O Leary´´, en honor al militar Daniel Florencio O’Leary. La empresa constructora es norteamericana y se desconoce su nombre. Cuentan la historia que dicha empresa utilizó un material de acero restante, o retazos de los que quedaron con el que se habría construido la Torre Eiffel e París, pero nunca se comprobó que eso fuera así.
El hierro y el Puente
La historia reseña que el hierro utilizado para la estructura del puente recibió un tratamiento de refinación llamado pudelado, que permitía retirar el excedente de carbono en el momento de la fundición del mineral.
Es un tratamiento que consiste en hacer que el hierro fundido pierda parte de su carbono. Con lo que se logra hacerlo menos propenso a la corrosión. Este proceso de refinación utiliza residuos de la industria metalúrgica llamada “escoria”.
En 1784 Henry Cort perfeccionó el proceso de pudín y en el siglo XIX fue mejorado por Joseph Hall y Samuel Baldwin Rogers. Este proceso desapareció con la llegada de procedimientos más económicos y eficientes del acero.
Reseñan los especialistas que este tratamiento permite obtener un hierro prácticamente puro que en aquella época era el mejor y el más robusto de los materiales.
Para protegerlo de la corrosión, el hierro está recubierto de una gruesa capa de pintura, que hay que renovar. Esta frecuencia sigue respetándose aún hoy día.
Hierro enlucido y menos corrosión
Los expertos explican que un procedimiento llamado “descarburación” consiste en calentar el hierro fundido a temperatura alta, mezclándolo con la escoria de forma homogénea. Esta mezcla se hace con un gancho alargado llamado “cursi”. Una vez tratada se convierte en un hierro fundido llamado «hierro enlucido» que será el que se entregue a los industriales para su trabajo.
Lo interesante del hierro que supuestamente fue utilizado para levantar el O’ leary es que se dice que pudiera tratarse de retazos del hierro utilizado por los contratistas que levantaron la Torre Eiffel ante el parecido del material uilizado.
El puente O’leary es un tesoro arquitectónico escondido en la ciudad, de gran valor cultural patrimonial – histórico sigue ahí de pie después de cien años enfrentando la desidia y al hampa.
Los chatarreros
Los metales más buscados para la venta en el millonario negocio de las chatarras son: el hierro, que es el más usado y aprovechado de todos, probablemente por su dureza y su capacidad de fabricar otros metales como el acero. Usado en la industria de la construcción en puertas, herramientas, tornillos, adornos, etc.
El plomo, que es usado en baterías y fácil de fundir, y el latón que es muy usado en bisutería, y es una mezcla de cobre y zinc que está presente en muchos hogares.
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