En la ciudad de Mérida, se ha creado un impresionante mural en honor al venerado doctor José Gregorio Hernández. Esta obra de arte, considerada la más grande del mundo en su tipo, está compuesta por más de 40.000 piezas de cerámica importadas.
El cardenal Baltazar Porras bendijo el mural, expresando que este es un símbolo de fe y que la meseta merideña, a través de esta obra, iluminará al resto del mundo. Además, pidió bendiciones para la tierra merideña.
Un detalle notable del mural es que en los ojos del doctor José Gregorio Hernández se reflejan dos importantes edificaciones de Mérida: la Catedral y el Hospital Universitario de los Andes.
El presidente del colegio médico de Mérida, Cristian Pino, informó que el mural tiene unas dimensiones de siete metros de alto por cinco metros de ancho.
Noticia al Día / El Universal
