Maestros de Venezuela volvieron este lunes a las calles para reclamar "salarios justos" y mejoras en las escuelas cuando faltan pocas semanas para el inicio del nuevo período escolar previsto para el 2 de octubre.
Agitando pancartas con consignas como "¡No al salario de hambre, no a pensiones de muerte!" y "¡Salarios y pensiones indexados a la canasta básica!", maestros activos y jubilados marcharon en rechazo a la "bonificación" de los salarios y el deterioro de la educación.
"Entro en un estado de ira porque nos han puesto como mendigos, lo ponen a uno como mendigo", lamentó Xiomara Mijares, una maestra con 25 años de servicio que se sumó entre unos 300 manifestantes que hicieron paradas en la Defensoría del Pueblo y al Ministerio Público, en el centro de Caracas.
"Nos han convertido a los trabajadores del país en maquiladores o esclavos que es lo mismo, porque no percibimos un salario para vivir dignamente", dijo Mijares, con 30 alumnos a cargo.
Lenin Barrios, profesor de inglés de 53 años con 20 de servicio, declaró a la AFP que recibe el equivalente a unos 25 dólares por mes.
"Es menos de un dólar diario", señaló, tras asegurar que sobrevive gracias a las ayudas de una hijastra. "Necesitamos que nos escuchen", clamó.
Lo que perciben está muy por debajo de la canasta alimentaria en Venezuela, estimada en agosto de 2023 en más de 502 dólares, según el Cendas.
Otro de los reclamos se centró en el deterioro en la calidad en la educación, al punto que alumnos son pasados de grado sin saber leer ni hacer ejercicios básicos de matemáticas.
Debido a la crisis, en las escuelas públicas solo se dictan clases dos veces por semana, e incluso una, en algunos casos.
"El gobierno para no pagarnos el salario justo ordenó que tuviéramos un horario mosaico donde trabajamos dos días a la semana y los otros tres nos dijeron que emprendiéramos", añadió Mijares, obligada a rebuscarse con tareas dirigidas.
En este contexto, Elsa Castillo, representante de la Federación Venezolana de Maestros, considera que no están dadas las condiciones para retornar a clases,aunque este lunes los docentes fueron llamados a iniciar labores "administrativas".
"El mensaje para los docentes es no incorporarse, no es paro, no es huelga", afirmó al citar una cláusula contractual que permite a los maestros ausentarse por eventos "fortuitos", y en este caso, los salarios "no alcanzan ni para pagar pasajes".
AFP