La crisis climática -un fenómeno que el gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, eliminó de sus prioridades este año- aumentó en un 10 % la fuerza de los vientos del huracán Milton y, en consecuencia, posibilitó que este tocase tierra en EEUU como un ciclón de categoría 3, en lugar de 2.
Además incrementó las lluvias de Milton entre un 20 y un 30 %, según una investigación divulgada este viernes por un equipo de científicos climáticos de la red World Weather Attribution (WWA).
Se trata de un análisis rápido sobre la vinculación del calentamiento global con fenómenos meteorológicos extremos como Milton y Helene, que han causado muerte y destrucción en Estados Unidos durante las últimas dos semanas.
Escenarios climáticos futuros
La investigación detalla que los eventos de fuertes precipitaciones de un día como el asociado con Milton son entre un 20 % y un 30 % más intensos y aproximadamente el doble de probables en el clima actual, es decir, «1,3 grados centígrados más cálidos de lo que habrían sido sin el cambio climático inducido por el hombre».
Un calentamiento global que ha duplicado, según WWA, la probabilidad de que se produzcan fenómenos extremos similares al del huracán Milton.
Estos resultados, precisan los investigadores, se basan en datos de observación meteorológica y no incluyen modelos climáticos, aunque los resultados son compatibles con estudios de otros huracanes en el área y muestran un «aumento similar de la intensidad de los ciclones de entre el 10 % y el 50 %» debido a la crisis climática.
«Estamos convencidos de que los cambios en las fuertes lluvias de Milton, que ya se ha disipado en el Atlántico, son atribuibles al cambio climático causado por el hombre», dijo WWA, una colaboración científica internacional que realiza estudios rápidos de atribución climática.
El modelo IRIS utilizado por WWA para investigar la intensidad de los vientos de Milton arrojó que en un clima 1,3 grados centígrados menor, «las velocidades máximas» del viento de sistemas similares a Milton «son más fuertes que en un mundo sin cambio climático».
La crisis climática en Florida es cosa de «fanáticos verdes»
Frente a este consenso de los científicos internacionales del WWA, el gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, siempre se ha mostrado contrario.
En mayo pasado firmó una ley por la que la crisis climática dejó de ser una de las grandes prioridades del estado, en rechazo a la «agenda de los fanáticos verdes radicales», señaló entonces.
La medida dejó en segundo plano la realidad de la exposición del estado al aumento del nivel del mar, las temperaturas extremas registradas en 2023, además de la graves inundaciones y fenómenos meteorológicos severos.
La legislación eliminó la mayoría de las menciones a la crisis climática en la ley estatal y revirtió una gran parte de las políticas que se introdujeron durante la administración de un anterior gobernador, el demócrata Charlie Crist (2007-2011).
Noticia al Día / EFE