Seis personas murieron el viernes, cuando un hombre disparó en una localidad rural de Misisipi, en el sur de Estados Unidos, a lo que el presidente Joe Biden respondió llamando de nuevo a endurecer los controles de armas, apenas días después de otro tiroteo letal en una universidad.
La Policía dijo que el individuo, que ahora está bajo custodia, disparó a una persona en una tienda en la pequeña ciudad de Arkabutla, y luego fue a una casa cercana y mató a una mujer, según medios locales.
La cadena CNN reportó más tarde que la mujer era su exesposa.
A continuación, el hombre condujo su vehículo hasta otra casa que era su residencia y en cuyas cercanías mató a otras dos personas, según dijo el sheriff Brad Lance a CNN.
La Policía lo persiguió hasta una segunda casa, donde fue detenido.
Otras dos personas posiblemente relacionadas con el tirador, un hombre y una mujer, fueron encontradas muertas en ese lugar, añadió Lance.
La oficina del sheriff del condado de Tate identificó al presunto autor de los disparos como Richard Dale Crum, de 52 años. Las autoridades no han mencionado ningún motivo para el tiroteo.
La escuela primaria en la cercana Coldwater se puso en confinamiento, mientras que los funcionarios encargados de hacer cumplir la Ley persiguieron al sospechoso, de acuerdo con su página de Facebook.
En un comunicado difundido por Twitter, el gobernador de Misisipi, Tate Reeves, dijo que el sospechoso estaba bajo custodia.
"En este momento, creemos que actuó solo. Se desconoce el motivo", señaló Reeves.
El tiroteo del viernes se produce apenas días después que otro hombre, sin motivo conocido, atacó un campus universitario en el estado de Michigan, matando a tres personas.
El presidente Joe Biden se pronunció el viernes en la noche haciendo eco del mismo sentimiento exasperado que expresó después del tiroteo en Michigan.
"Suficiente", dijo el Mandatario.
"Llevamos 48 días del año y nuestra nación ya ha sufrido al menos 73 tiroteos masivos. Los pensamientos y las oraciones no son suficientes. La violencia armada es una epidemia y el Congreso debe actuar ahora”, dijo Biden.
El mes pasado también hubo dos tiroteos masivos en menos de una semana.
Biden llamó de nuevo al Congreso para reinstaurar la prohibición nacional que existió para los rifles de asalto entre 1994 y 2004, pero que encontró la oposición de los republicanos.
Se estima que el último año hubo 44 mil muertes relacionadas con armas en Estados Unidos, de acuerdo con la base de datos Gun Violence Archive.
AFP
