Mariana Seoane pasó de ser la protagonista de telenovelas a la antagonista, desde que hizo el papel de villana en Tormenta en el paraíso en 2007.
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La actriz y cantante mexicana tuvo roles similares en otras producciones como Por ella soy Eva, La tempestad y Hasta el fin del mundo.
Tras muchos años siendo la villana de la historia, la estrella interpreta a Bernarda Rangel, una madre soltera dispuesta a todo por proteger a sus hijas en el nuevo melodrama estelar de Univision, que protagonizan Carolina Miranda y Andrés Palacios.
Su nuevo rol en la telenovela es como la veterinaria de la hacienda La Esperanza; le encanta su trabajo y cuidar a sus hijas. Después de todo lo que ha pasado en su vida, protege celosamente a sus hijas para que no sufran lo mismo.
Sobre el personaje, Seoane expresó en entrevista para el programa Hoy: "Estoy muy feliz porque este personaje es una mujer con los ovarios bien puestos".
"Está muy padre la historia porque a mí me ha permitido como actriz tener un juego increíble, dejar atrás a las villanas y volverme madre".
Añadió: "Ella ha sufrido mucho. Sufrió desde muy jovencita, entonces se ha vuelto dura, pero tiene un corazón muy noble. Es veterinaria, cosa que me encanta porque amo los animales", reseñó People.
Mariana Seoane y sus actuaciones en las telenovelas mexicanas
Mariana Seoane, de 47 años, debutó en 1995 en la telenovela Retrato de familia.
Asimismo, tuvo otras apariciones en títulos como Canción de amor, Los hijos de nadie y Mi pequeña traviesa.
El primer protagónico de Mariana Seoane llegó con la telenovela producida y dirigida por Pedro Damián en 1999: Amor gitano, la cual protagonizó junto a Mauricio Islas.
Mariana fue operada en marzo de 2022, los doctores detectaron que tenía un tumor en la tiroides. Conforme pasó el tiempo, la masa fue aumentando, por lo que la actriz se sometió a una cirugía para retirarlo.
Para ese entonces dijo en una entrevista para Hoy ese mismo año: “El miedo que uno vive cuando te dicen: ‘Mide como una pelota de golf, está al lado izquierdo, está al lado de la carótida y a tus cuerdas vocales’. Entonces es como si el mundo se te viene encima”.
