Tras consagrarse campeón mundial juvenil en Japón 1979, Diego Armando Maradona debió interrumpir su ascendente carrera futbolística para cumplir con el servicio militar obligatorio, conocido como “la colimba”, en el Regimiento de Infantería 3 de La Tablada.
La dictadura de Jorge Rafael Videla utilizó la imagen de Maradona y de otros cinco integrantes de la selección juvenil como símbolo de disciplina y patriotismo, obligándolos a realizar la conscripción pese a su condición de figuras deportivas emergentes.
Durante su paso por el servicio militar, Maradona compartió experiencias con jóvenes de su misma edad, entre ellos el actor Gabriel Corrado, quien años más tarde recordó la emoción de convivir con el astro en esa etapa.
El propio Maradona, ya convertido en ídolo mundial, criticó la situación: “Aunque fuimos campeones del mundo, el botón de Videla nos usó de ejemplo”.
La experiencia marcó un contraste entre la gloria deportiva y las imposiciones políticas de la época. Mientras Maradona se preparaba para dar el salto a Boca Juniors, debió cumplir con las obligaciones militares que reflejaban el control del régimen sobre la juventud argentina.
Noticia al Día / El Pulzo
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