La llama olímpica llegó a París durante el desfile militar anual con motivo de la fiesta nacional de Francia, el Día de la Bastilla.
Miles de soldados, marineros, socorristas y médicos se reunieron para desfilar mientras la ‘Patrouille de France’ sobrevolaba la ciudad. Las próximas paradas de la llama incluyen la catedral de Notre Dame, la histórica universidad de la Sorbona y el Museo del Louvre.
Durante su recorrido por Francia, la llama pasará por ciudades icónicas, monumentos históricos y lugares de importancia cultural. Se prevé que miles de portadores participen en el relevo, representando la diversidad de la sociedad francesa y el espíritu olímpico de inclusión.
El viaje culmina en París, donde finalmente la llama será utilizada para encender el pebetero olímpico durante la Ceremonia de Apertura de los Juegos, marcando el inicio oficial de la cita olímpica.
Este recorrido no solo sirve para transportar la llama, sino que también actúa como un preludio al evento, generando entusiasmo y uniendo a las personas en torno al espíritu olímpico.
La capital francesa se prepara a pocos días del inicio de los Juegos Olímpicos de París, los cuales inician el próximo 26 de julio.
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