El anuncio de Dino sigue a un pedido de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), en medio de una investigación estatal extensa, la cual llevó a algunos clubes locales y a los Rapids de Colorado de la MLS a suspender a varios futbolistas de sus actividades.
La pesquisa en el estado de Goiás involucró inicialmente partidos de la temporada anterior en la primera división brasileña. Sin embargo, se ha ampliado para abarcar cotejos de la segunda categoría.
Los fiscales dijeron que algunos de los deportistas recibieron pagos de entre 50 mil y cien mil reales (diez mil a 20 mil dólares) para hacerse amonestar o cometer penales.
El ministro brasileño de Justicia dijo en Twitter que la Policía federal del país abrirá una investigación “debido a la evidencia de amaño de partidos en eventos deportivos, con repercusiones interestatales e internacionales”.
Luego del anuncio de Dino, la MLS informó en un comunicado que un jugador, al que no identificó, ha sido suspendido de las actividades con el club, debido a reportes sobre su presunto involucramiento con apuestas deportivas ilegales.
La decisión surgió horas después que el diario O Globo informó que el mediocampista brasileño Max Alves, de los Rapids de Colorado, fue mencionado en la indagación. El club estadounidense confirmó en un comunicado que el futbolista suspendido es miembro de su plantel, aunque no dio su nombre.
Alves no ha emitido comentarios sobre el caso.
Más temprano, Athletico Paranense reportó en sus redes sociales que el lateral izquierdo Pedrinho, de 20 años, y el mediocampista ecuatoriano Bryan García, de 22, habían sido suspendidos “preventivamente” hasta el final de la investigación de los fiscales en Goiás.
Cruzeiro, Fluminense y América tomaron la misma decisión sobre el mediocampista de 29 años Richard, el defensa de 23 Vitor Mendes y el lateral derecho de 37 Nino Paraiba, respectivamente.
El miércoles por la noche, Curitiba informó que había tomado las mismas decisiones sobre dos de sus jugadores, presuntamente mencionados en la investigación: el delantero de 28 años Alef Manga y el mediocampista de 29 Jesus Trindade. Un abogado de ambos jugadores negó que hayan tenido relación con el ardid.
Ninguno de los jugadores ha respondido a la solicitud de dar un comentario a The Associated Press. Tampoco se han expresado a través de redes sociales.
Medios brasileños han manifestado su preocupación sobre el desempeño de muchos de los jugadores aludidos en partidos de la temporada 2022, y agregaron que podrían ser objeto de la investigación conocida como Pena Máxima que comenzó en febrero.
En un comunicado, el club Internacional informó que el volante Mauricio no jugaría el miércoles por la noche contra Athletico Paranaense, dentro de la Serie A brasileña, después que la prensa local lo vinculó con el escándalo.
El club de Porto Alegre añadió que confía en el jugador, quien negó cualquier acto indebido y afirmó que continuará con el equipo.
Los fiscales no le confirmaron a la AP que estos jugadores estén bajo investigación, pero reportaron en una declaración que 16 personas serán juzgadas por el caso, incluidos otros siete futbolistas.
Uno de los jugadores en la lista, el defensa de Santos Eduardo Bauermann, fue suspendido por su club el martes.
La AP tuvo acceso a documentos del caso de Bauermann y de otros jugadores. Bauermann mostraría tener conocimiento del complot y estar involucrado. Las evidencias de los fiscales alegan además que el zaguero de Santos no sólo intercambió mensajes de texto que ofrecen amañar partidos, sino que sugirió en noviembre que podía conseguir que dos compañeros ayudaran con la operación.
“Todos estamos molestos: Yo, el plantel, los periodistas”, dijo Odair Hellman, entrenador de Santos, acerca de Bauermann, durante una conferencia de prensa, luego que su equipo goleó 3-0 a Bahía en un encuentro de primera división realizado el miércoles. “Tenemos que verlo a él como un ejemplo de lo que no se debe hacer”.
La CBF anunció en un comunicado que había pedido al Gobierno investigar, de modo que pudiera “centralizar toda la información sobre los casos que se investigan”.
El organismo rector del fútbol nacional añadió que “no hay posibilidad” de suspender los partidos de la primera división, bajo el argumento de que ésta “es también una víctima de los posibles actos delictivos.
Instó a que “el castigo de los deportistas y otros miembros de la operación fraudulenta se lleve a cabo en forma vehemente”.
“Trabajo con la Fifa y otros organismos internacionales, además de los clubes y las federaciones brasileñas, con la intención de combatir cualquier clase de delito, fraude o acto indebido en el fútbol”, enfatizó el presidente de la CBF Ednaldo Rodrigues, en un comunicado. “Defiendo la suspensión preventiva con base en sospechas concretas e incluso la prohibición del deporte en casos probados”.
AP
Lee más: Padre de Messi asegura que no hay convenio con ningún club