La imagen de Brainer Bonaci, afectado tras un incidente en el juego del martes, se volvió viral, pero el joven torpedero de Leones del Caracas decidió eliminarla.
Sin embargo, este miércoles, el novato de 23 años brilló en el campo al conectar dos jonrones, uno de cada lado del plato, llevando a su equipo a una victoria crucial de 9-4 sobre Tiburones de La Guaira.
Para Leones, que habían sido barridos en una doble tanda por Cardenales el día anterior, este duelo era vital. Lograron un rendimiento sobresaliente en todas las áreas: la ofensiva despertó, la defensa fue sólida y el pitcheo cumplió, poniendo fin a una racha de seis derrotas.
A pesar de su destacada actuación, Bonaci prefirió no acaparar la atención. “Fue una noche magnífica para todos, no sólo para mí”, comentó en la rueda de prensa posterior al partido. “Lo importante es que pudimos levantarnos todos, desde el manager hasta cada uno de los miembros del equipo”.
Recordando el momento difícil del día anterior, cuando fue consolado por su compañero José Rondón, Bonaci expresó: “La camisa me duele, pero tuve un compañero que me apoyó y me alentó. Tengo orgullo y convicción”. Además, el bullpen de Leones tuvo un desempeño efectivo, sin permitir anotaciones.
Las cuatro carreras de Tiburones fueron responsabilidad del abridor Jesús Vargas, quien estuvo a un out de completar 5.0 innings.
La victoria fue para Junior Flores (2-2), el tercer lanzador utilizado por Caracas, mientras que la derrota fue para el dominicano Luis Peña, abridor de La Guaira.
Leones permanecerán en casa varios días y este viernes enfrentarán a Águilas del Zulia, con Wilmer Font como abridor en su segunda aparición de la temporada. Por su parte, Tiburones se trasladarán para recibir a Cardenales de Lara, con Luis Arejula como lanzador inicial.
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