
La arepa venezolana ha trascendido fronteras, conquistando paladares en todo el mundo y consolidándose como un emblema cultural y gastronómico internacional. Impulsada por la diáspora, este plato simple y versátil, además de ser naturalmente libre de gluten, se ha convertido en un símbolo de identidad que une a los venezolanos en cualquier lugar del planeta.

Este fenómeno global tiene sus raíces en una iniciativa que surgió de la necesidad de conexión. En julio de 2012, la organización Venezolanos en el Mundo (VenMundo), a través de sus fundadores Rafael Mourad, Luisana La Cruz y Tony De Viveiros, decidió crear un evento masivo para apoyar a la comunidad en el exterior.
Así nació el "Arepazo Mundial", un evento que unió a la diáspora alrededor de su comida más querida. Su éxito fue tal que, a partir de 2013, se designó el segundo sábado de septiembre como el Día Mundial de la Arepa.
Un lienzo de sabores y tradición
Hecha a base de harina de maíz, la arepa es un lienzo que permite infinitas creaciones. En Venezuela, su elaboración es un ritual cotidiano, con una variedad de rellenos que reflejan la riqueza de cada región. En el Zulia, la creatividad se desborda con rellenos suculentos como la carne mechada, el pollo, las mollejas y por supuesto, las icónicas "tumbarrancho" y la "cabimera", estas últimas las reinas de la Costa Oriental del Lago.
Gana popularidad
La arepa ha ganado recientemente una nueva ola de popularidad, destacándose en eventos internacionales como el "Mundial de Desayunos" organizado por el popular streamer español Ibai Llanos, donde compitió en la gran final contra Perú, demostrando una vez más su capacidad para captar la atención global.

Hoy, más de 80 ciudades alrededor del mundo se unen para celebrar este día con eventos y actividades, demostrando que la arepa no solo alimenta el cuerpo, sino que también nutre el sentido de pertenencia de los venezolanos en el extranjero.
Noticia al Día/ Fotos: Cortesía