El primer astrofísico nacido en Maracaibo fue pieza clave para que la misión se pudiera llevar a cabo. Todo su legado, su investigación y hasta su registro de vida, fue borrado. Su método, su trabajo, determinó el lugar idóneo para el aterrizaje del Apolo XI y se logró reducir a la mínima expresión el riesgo para la vida de los astronautas
El 20 de julio de 1969 la misión estadounidense Apolo 11 colocó a los primeros humanos en la Luna, el comandante Neil Armstrong y el piloto Edwin F Aldrin. Ellos marcaron su huella en el satélite, donde permanecieron algo más de dos horas. Cincuenta años después, EEUU le ordena a la Nasa la vuelta al satélite, pero esta vez para quedarse.
El único satélite natural terrícola tiene menor masa que el planeta Tierra y un tamaño cercano a la cuarta parte de éste. Aquí no hay aire, ni agua, ni vida, no tiene movimiento libre por el espacio, la atracción que ejerce la Tierra sobre ella hace que ésta orbite a su alrededor. No hubo ningún impedimento para que el hombre llegara hasta ahí.
Estos hombres que tuvieron la suerte de pasar a la historia por llegar a la Luna, no supieron mucho del trabajo científico de aquellas otras personas como el zuliano, quienes trabajaron día y noche para que pudieran retornar a la tierra sin inconveniente y mucho menos, el conocimiento de que un nativo de la Tierra del Sol Amada fuera clave para escoger el sitio donde descenderían.
Décadas después, un escritor venezolano con raíces españolas decidió sacar a la luz el trabajo del astrofísico Héctor Rojas, quien habría sido la pieza clave para que la misión se pudiera llevar a cabo.
El Dr. Rojas desarrolló el Método de las Transformaciones Sucesivas o Método Rojas de Coeficientes Espaciales, mediante el cual hizo los cálculos necesarios para el alunizaje del Apolo 11, en 1969.
El investigador Pierre Monteagudo ha dedicado años de su vida en dar a conocer detalles de la biografía del astrofísico Héctor Rojas, quien luego de su arduo trabajo fue “vetado” en la historia de la misión Apolo 11.
El primer astrofísico nació en Maracaibo el 10 de junio de 1928 fue postulante a viajar a la Luna en los años setenta, pero todo su legado, su investigación y hasta su registro de vida fue borrado.
Después de cuatro décadas, el investigador y biógrafo Pierre Monteagudo se propuso esclarecer las incógnitas que existen en torno de la actuación del científico nacido en nuestra tierra, en un minucioso ensayo denominado Expediente Rojas, publicado en el año 2016.
Las investigaciones han concluido en que, el llamado Método Rojas determinó el lugar idóneo para el aterrizaje del Apolo XI. Con ello, logró reducir a la mínima expresión el riesgo para la vida de los astronautas de ese histórico primer alunizaje tripulado.
El biógrafo venezolano aseguró en una entrevista a El Diario que su lucha por encontrar todos los documentos que certifican la participación de Rojas en la Nasa ha durado ocho años.
“Cuando empecé a buscar información y vi que no había nada en ningún lado de su trabajo, me llamó mucho la atención. Fui profundizando la búsqueda y me di cuenta de que prácticamente había quedado al margen de la historia”, expresó.
“Él no permitió que usaran sus estudios para fines bélicos”, afirmó.
Monteagudo asegura que conoce el título de una docena de informes realizados por el astrofísico venezolano. Sin embargo, solo tres han salido a la luz luego que por sus propios medios los encontró en el Observatorio de París y solicitó su publicación en el Servicio de Información Técnica de la Nasa.
Continúa la investigación
Monteagudo sigue solicitándole a la Nasa que publique un cuarto informe hecho por el astrofísico Rojas y que contiene información de cómo se organizó y se preparó todo para la misión del Apolo 11.
De acuerdo con el escritor, en él “Rojas le propone a la Nasa que antes de enviar el Apolo 11, tenían que enviar otra nave tripulada para estudiar si la Luna tenía la consistencia necesaria para soportar el peso del módulo”.
Asegura que últimamente la receptividad de los venezolanos en cualquier parte del mundo ha crecido y aplaude que la historia del astrofísico venezolano se esté descubriendo en su comunidad.
Noticia al Día / El Diario