La imagen oficial del Dr. José Gregorio Hernández que adornará la fachada de la Basílica de San Pedro en el Vaticano el día de su canonización, tiene una historia de profunda fe y un detalle artístico clave: una sutil sonrisa agregada para humanizar al "Médico de los Pobres" y acercarlo a sus devotos.
El relato proviene del artista Eduardo Chumaceiro, quien en 2019 trabajó junto al Padre Gerardino Barracchini, Vicepostulador de la Causa de Canonización, en el proyecto visual para el centenario de la muerte del Beato.
Según una publicación en sus redes sociales, Chumaceiro aparte de agradecer la oportunidad, relata que el Padre Barracchini solicitó explícitamente modificar una fotografía antigua de Hernández para suavizar su apariencia.

El padre Gerardino me dijo: “Esa es la imagen que quiero utilizar, pero necesitamos hacer que José Gregorio se vea más amigable y cercano”. el Vicepostulador añadió: "Recuerdo haberle respondido que eso implicaba alterar su imagen original, pero él me explicó que todas las imágenes existentes lo mostraban con un semblante muy serio, y que su intención era humanizarlo, hacerlo sentir más próximo a la gente".
Aunque la idea inicial implicaba alterar una imagen histórica, la visión del Vicepostulador era clara: presentar un José Gregorio más accesible, reflejando su caridad y espíritu.
La imagen que viajó a Roma
Para lograr este delicado cambio, el artista contactó al diseñador gráfico Ricardo Arispe. Quien propuso dos versiones, eligiendo finalmente la que presentaba "una sonrisa más suave y natural". Esa significativa imagen fue la protagonista, para desarrollar todo el proyecto visual en el centenario de la muerte del santo trujillano, y fue ese mismo material el que se utilizó para introducir la Causa de Beatificación de José Gregorio Hernández en Roma.

La culminación de este esfuerzo ocurrió recientemente, cuando Ricardo Arispe contactó al artista para compartir un emocionante video de la imagen oficial elegida para la canonización, la misma que será colocada en el tapete de la fachada del Vaticano.
"No puedo más que sentir una profunda gratitud. Gracias, Ricardo. Gracias, Padre Gerardino. Y gracias, desde el corazón, a la persona que me recomendó para este trabajo", concluye Eduardo Chumaceiro en la publicación.
La imagen elegida por el Vaticano no solo celebra la santidad de José Gregorio Hernández, sino que también honra la intención de quienes buscaron presentarlo al mundo con el calor humano y la cercanía que caracterizaron su vida.
Noticia Al Dia / Arelys Munda