La tarde de este sábado 13 de abril, el canciller Yván Gil difundió un comunicado en el cual “Venezuela, rechaza enérgicamente la ilegal licencia de producción de petróleo otorgada por el Gobierno de la República Cooperativa de Guyana a empresas petroleras en el bloque Stabroek”.
Asegura que Guyana pretende disponer de los recursos energéticos en áreas marítimas sin delimitar, pudiendo comprometer recursos de Venezuela.
En el escrito se expresa un rechazo “categórico” a la secuencia de actos ilegítimos perpetrados por Guyana al “violentar radicalmente el derecho internacional, mediante una cadena de abusos y transgresiones”, así como también incumplen con sus compromisos adquiridos con Venezuela el pasado 14 de diciembre en Argyle.
Se indica además que “el Gobierno de Guyana no posee derechos soberanos sobre estas áreas marinas y en consecuencia cualquier acción dentro de estos límites contraviene las regulaciones y los acuerdos fijados por el derecho internacional”.
Venezuela declara entonces contundentemente que los asuntos marítimos entre los dos países “no pueden ser resueltos unilateralmente por Guyana”, y denuncia que estas actuaciones arremeten contra el pueblo venezolano y “embisten sus derechos soberanos", situación que no será permitida por el Gobierno de Venezuela.
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