Este sector de la ciudad, que cada día crece aceleradamente en la misma proporción que la falta de atención gubernamental, activa su movimiento comercial, legal e ilegal, sobrevive en el tiempo y se ha convertido prácticamente en el “otro casco central de Maracaibo, esa zona de la ciudad con la que "coquetean" muchos dirigentes políticos en tiempos de elecciones para prometer su descentralización.
Aquí han nacido reconocidos políticos, dirigentes de todas las tallas, desde gobernantes, presidentes de institutos autónomos, diputados, concejales de cualquiera de las toldas políticas. Algunos han luchado por lograr lo mejor para su parroquia, otros simplemente se han mudado a aquellas de mayor "categoría" y uno que otro permanece en sus residencias donde se criaron y luchan por lograr lo mejor para su sector cuando se ubican en los puestos políticos.
Sus habitantes se jactan en señalar, que no necesitan la mayoría de las veces el tener que movilizarse hacia la zona céntrica. Dicen que en la parroquia se consigue de todo, desde “sacar· una partida de nacimiento hasta “poner” una denuncia en una prefectura y dar a luz un niño.
La llamada Maracaibo Oeste se conecta con la Bomba Caribe (norte), La Curva de Molina (centro) y el sector de Los Plataneros (sur), puntos periféricos donde, incluso, hacen vida el comercio formal e informal como si fuese el propio casco central.
Está conformada por las parroquias Idelfonso Vásquez, Venancio Pulgar, Antonio Borjas Romero, Carracciolo Parra Pérez, Raúl Leoni, Francisco Eugenio Bustamante, y a pesar de que en muchas urbanizaciones y barriadas sus habitantes han dejado sus casas abandonadas, al huir del país como muchos otros, buscando mejoras en el exterior, son una gran mayoría los que permanecen en esta zona y levantan sus negocios.
La más codiciada por los políticos
Esta zona de Maracaibo es la más codiciada por los políticos en tiempos electorales, y no por esto deja de ser la más olvidada. Sus carencias están vigentes, y al momento del encuentro electoral se convierte en la más apetecida por los contendores.
Una zona que es muestra de que los servicios públicos continúan sin consolidarse, un transporte deficiente y altos índices de inseguridad y demás penurias que a diario enfrentan sus habitantes.
Muchas de sus calles no tienen asfalto y las que una vez tuvieron, son hoy en día “un paseo lunar” por la cantidad de huecos que la hacen intransitable. Para nadie es un secreto que el Oeste se ha convertido en ruinas, donde la crisis eléctrica, de agua y carencia general de servicios, gobiernan junto al hambre y la miseria, sobre todo en las comunidades indígenas.
El coqueteo con un municipio autónomo
Para el licenciado Nelson Dávila, coordinador general del movimiento Unión y Progreso, el Oeste de Maracaibo continúa siendo el “patio trasero” de la ciudad.
“Como movimiento promovemos la descentralización y si hay un punto fundamental en Maracaibo, se trata de la zona oeste”. Estamos ganados a la municipalización de este sector con el fin de darle respuesta a los problemas de los vecinos de esa importante zona marabina que se sienten abandonados por todos los niveles de gobierno.
“Maracaibo Oeste” tiene más temprano que tarde que ser un municipio e iniciar su propio desarrollo a la par del Maracaibo viejo”, dice Dávila.
Considera que llegó la hora de rescatar la ciudad del abandono a la que la han sometido, y “estamos trabajando por una mejor Maracaibo, vamos a cambiarles el rostro a los barrios, y brindarle alegría y esperanza a cada uno de ellos", insistió el dirigente en una reciente visita a la redacción de Noticia al Día.
Población indígena de la zona
En las parroquias del oeste se encuentra la mayor parte de la población indígena, y por ello, ante la Cámara Municipal se ha propuesto que sea decretado por el alcalde de Maracaibo, Rafael Ramírez, patrimonio cultural indígena para seguir impulsando y fortaleciendo las comunidades wayúus”.
La concejal Rosahana Larreal lo ha hecho saber en varias oportunidades, incluso cuando le ha tocado ser oradora de orden, pero hasta el momento su inquietud no ha sido tomada en cuenta.
Asegura que la población wayúu del oeste conserva sus tradiciones y un decreto de patrimonio cultural indígena permitiría fortalecer y conservar las tradiciones.
