A pocas horas del esperado encuentro entre Venezuela y Bolivia, el estadio Monumental de Maturín ya respira fútbol. La emoción se palpa en los alrededores, dando vida a un ambiente vibrante y cargado de mucha fe.
Las entradas de acceso se agotaron, lo que se garantizará un espectáculo a casa llena lista para teñir las gradas vinotinto con un aforo de más de 50.000 espectadores.
Desde tempranas horas, bajo un cielo nublado, fanáticos de la Vinotinto han acudido al recinto deportivo, para alentar a la nacional en un partido que podría marcar un hito en su aspiración de clasificar, por primera vez, a un mundial de fútbol.
Las puertas del Monumental ya están abiertas, y poco a poco, miles de fanáticos ingresarán con la ilusión de un triunfo histórico ante el combinado del altiplano.
