El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, presidió una reunión de trabajo con la dirección nacional del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), en la que se evaluó la primera etapa de esta nueva ofensiva contra la corrupción.
En sus declaraciones, manifestó que ya ha comenzado una reestructuración al más alto nivel en la industria petrolera del país y en los tribunales de la República. El jefe de Estado indicó que desde la dirección nacional del PSUV se ha asumido una “posición vertical, frontal, absoluta contra la corrupción”.
Relató que desde el pasado mes de octubre se venían manejando las investigaciones sobre estas “mafias de la corrupción”, enquistadas en Petróleos de Venezuela SA, con ramificaciones en la empresa privada y algunos funcionarios que se prestaron para cometer estos delitos.
En tal sentido, Maduro comentó que ha estado él mismo al frente de las investigaciones en colaboración con la Fiscalía General de la República y la Policía Anticorrupción, con los que se logró “desmembrar a estas mafias de corrupción que se han enquistado en el aparato económico de Venezuela”.
El Presidente detalló que además de estas “mafias que se incrustaron en PDVSA y en la Sunacrip”, también se inició un procedimiento para actuar en contra de la venta de sentencias para favorecer a narcotraficantes por parte de jueces con altos cargos.
También habló sobre el caso del alcalde de Tejerías, estado Aragua, vinculado al delincuente alias el "Conejo", que azota a la región. “¿Quién iba a pensar que aquél que nos ponía la cara (cuando visitó la zona de desastres por las lluvias), cuando nos daba la espalda estaba negociando con este criminal y asesino?”.
Renuncia de Tarek El Aissami
El presidente Nicolás Maduro dijo que recibió la renuncia del hasta entonces ministro de Petróleo, Tarek El Aissami, quien hizo pública su decisión a través de las redes sociales. El Mandatario comentó que el funcionario está en disposición de cooperar en todas las investigaciones.
Agregó que confiando en el compromiso con la revolución que ha demostrado, aceptó su renuncia para no afectar el curso de las averiguaciones y agradeció su plena colaboración para llegar hasta el fondo de la situación.
Maduro definió este momento como un episodio doloroso, duro, pero necesario para el “renacimiento de la revolución ética”, por lo que pidió el apoyo del pueblo en esta etapa. “Hay que estar unidos para ganar esta batalla contra la corrupción”, aseguró.
Reflexionó sobre todo lo que hace la revolución para “producir cada dólar e invertirlo en el pueblo, cuánto cuesta parir los recursos para invertirlos en educación, en el nuevo sistema de salud pública, en las bricomiles, cumplirles a los trabajadores, construir las viviendas y mantener la estabilidad económica. Para que vengan grupos enquistados de mafiosos y ladrones a meterles la mano a los recursos que son del pueblo venezolano”.
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