Luego de casi dos meses de dolor por pensar que no le daría ni siquiera su último adiós, el cadáver del joven Jhoxell Rincón llegó a Maracaibo.
El pasado 20 de marzo, una supuesta amiga llamó a su mamá, Yelitza Ramos, para notificarle de su trágica muerte. En la llamada le decía que Rincón se había caído de un barranco de unos 300 metros, en la provincia de Oxapampa, Perú.
La noticia los desgarró y ante la confirmación comenzaron a agilizar para repatriarlo, sin embargo, al intentar retirarlo de la morgue se lo negaron: La autopsia arrojaba que había sido asesinado.
Así comenzó la odisea para esta familia marabina, quienes informaron lo sucedido a este medio de comunicación.
A través de la publicación en todas nuestras redes sociales dieron con una empresa privada que hacía repatriaciones desde Perú a Venezuela.
"Nos pusimos en contacto con ellos y gracias a los familiares, amigos y allegados logramos recaudar el dinero y traerlo. Gracias a Noticia al Día por hacer eco de nuestra petición", dijo una tía con lágrimas en su rostro.
El cuerpo embalsamado viajó por tierra hasta que llegó a su tierra. "Ya Jhoxell David tendrá cristiana sepultura cerca de su familia", finalizó diciendo su tía.
Noticia al Día