Masivos incendios forestales estallaron cerca de Jerusalén la mañana del miércoles 30 de abril, coincidiendo con la conmemoración del Día de los Caídos en Guerra en Israel, un momento en que muchos israelíes visitaban tumbas.

La rápida propagación de las llamas obligó a evacuar comunidades y cerrar carreteras, incluso provocando que automovilistas abandonaran sus vehículos en las principales vías. Ante esta situación, el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, declaró la situación como una “emergencia nacional” y ordenó el despliegue de tropas para apoyar a los bomberos.
Según informes de medios israelíes, 120 servicios de bomberos y rescate movilizaron decenas de equipos de extinción, aviones y helicópteros en un intento por contener el avance del fuego.

“Estamos ante una emergencia nacional y todas las fuerzas disponibles deben movilizarse para salvar vidas y controlar los incendios”, dijo Katz en un comunicado de su ministerio.
La agencia de rescate israelí Magen David Adom (MDA) informó que cientos de civiles se encontraban en riesgo debido a los incendios. Además, señaló que dieciséis personas estaban siendo tratadas por lesiones leves por inhalación de humo, elevando el nivel de alerta al máximo. Medios locales cifraron en 12 el número de heridos por esta causa.
A medida que los incendios se propagaban, Israel solicitó ayuda extranjera para las labores de extinción en el área de Jerusalén.
Noticia al Día/RT