El británico Krishna Maharaj pasó más de tres décadas en una prisión en EE. UU. por un crimen que no cometió. Así lo reseña la BBC de Londres.
Fue acusado de asesinar a dos hombres en Miami en 1986 tras una supuesta disputa de dinero e inicialmente lo condenaron a muerte.
Su abogado, Clive Stafford, logró reducir la pena a cadena perpetua y luego halló evidencia que los asesinatos implicaban a miembros del cartel de Medellín.
Después de varios años de investigación y recopilar pruebas, Stafford pudo obtener una audiencia para demostrar la inocencia de Maharaj. Pero una corte de última instancia determinó que no era suficiente para dejarlo en libertad.
Nunca logró sacarlo de la cárcel.
Krishna Maharaj murió el pasado 5 de agosto por complicaciones de salud en el hospital de la prisión.