El Ejercito colombiano desmanteló siete refinerías ilegales de destilación de crudo en Tibú, en el departamento de Norte de Santander (noreste), que presuntamente eran de la guerrilla Ejército de Liberación Nacional (ELN) y en las que hallaron más de 670 mil galones de crudo hurtado del oleoducto Caño Limón-Coveñas.
Los militares, junto con la Fuerza Aérea y la Fiscalía General, llegaron a la vereda de Caño Victoria donde hallaron las refinerías dedicadas a destilar gasolina procesada, conocida como Pategrillo, hurtada del oleoducto de esta localidad, detalló el Ejército en un comunicado.
Las refinerías albergaban 18 piscinas artesanales de almacenamiento que contenían los 670 mil galones de crudo y otros elementos necesarios para el hurto.
En el lugar existían evidencias de una "grave afectación" al suelo, las fuentes hídricas y el bosque, por lo que las refinerías han causado un daño "devastador" en el territorio.
El oleoducto Caño Limón-Coveñas, de 770 kilómetros de longitud, transporta el petróleo desde los pozos de Arauca (en la frontera con Venezuela) hasta Coveñas, un puerto en el Caribe y es considerado uno de los principales de Colombia.
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Noticia al Día/Con información de EFE