Conmovedoras y esperanzadoras las palabras de pobladores de la comunidad de Barranquitas, en el estado Zulia, Venezuela, ante la colocación de paneles solares al ambulatorio de salud Teresa González, ubicado en ese sector, siendo este el primer centro de salud en la región funcionando con energía fotovoltaica.
Cuando se tiene un suministro de energía intermitente en los Centros de Salud, eso implica poner vidas en riesgo.
Se afectan los pabellones de maternidad, los quirófanos, los almacenes y laboratorios médicos que dependen de la electricidad para refrigerar los medicamentos, al igual que encender las luces, esterilizar el equipo y utilizar aparatos médicos que salvan vidas.
La mayoría de los centros de atención primaria situados en zonas remotas carecen de conexión a la red eléctrica; y no es posible llevar a cabo procedimientos básicos por al falta de disponibilidad de una fuente de energía.
La instalación de paneles solares en este tipo de centros de salud está ayudando a garantizar que el personal médico y sanitario reduzca las complicaciones de atencion a los pacientes.
Ofrecer una atención sanitaria de calidad, se necesita una fuente de energía fiable. Por ejemplo, es esencial mantener la cadena de frío para las vacunas y los medicamentos, y para ello se requiere refrigeración, cámaras frigoríficas y sistemas de tecnologías de la información para la gestión de existencias.
Contribuye también a poder ampliar las horas de funcionamiento, mejora la retención y contratación de personal médico y sanitario en zonas remotas y garantiza una atención sanitaria eficaz y segura las 24 horas del día, todos los días de la semana.
Los sistemas solares continúan promoviendo una mayor disponibilidad y calidad de los servicios de salud, sobre todo en zonas remotas y de difícil acceso, están contribuyendo a universalizar la cobertura sanitaria.
@lubio_lenin_cardozo