La joven Dubraska López, implicada en el asesinato de una estudiante de la Universidad Nacional Experimental de la Fuerza Armada (Unefa), núcleo Maracay, presuntamente ha recibido amenazas de muerte por parte de reclusas de la cárcel de Tocorón, por lo que la Policía ha tenido que intervenir.
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A Ziskeily Andrea Cordovés Figueroa, de 19 años, la encontraron muerta el viernes 1 de diciembre en las instalaciones de la Unefa. La asesinaron sus compañeros de clases: López, de 18, y Wilmer Granado, de 20, según el comisario Douglas Rico, director del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas.
Ambos están en un centro de detención preventiva del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas en la ciudad de Maracay, informó la organización no gubernamental Una Ventana a la Libertad.
«Al parecer, en el anexo femenino de Tocorón hay una chica que paga condena por homicidio y asegura ser familiar de Ziskeily. La verdad, tememos mucho de lo que le pueda ocurrir a Dubraska cuando la trasladen», dijo Mari Carmen Rengifo, amiga de la familia de López, a la ONG.
Asimismo, familiares de Granado aseguraron que no han podido verlo y que les piden que le dejen la comida en la recepción del CICPC, sin poder hablar con él. «Queremos entender qué fue lo que ocurrió», dijeron.
La fiscalía cuarta con competencia en homicidios del estado Aragua, le precalificó a López el delito de homicidio intencional por motivos fútiles e innobles; así como homicidio intencional por motivos fútiles e innobles en grado de coautoría a Granado, de acuerdo con la ONG.
Noticia al Día / El Aragüeño
