Primero el vocalista de Guns N’ Roses, Axl Rose, y luego el actor Jamie Foxx fueron acusados este miércoles de agresión sexual por diferentes demandantes, en víspera de la expiración de una ley que permite a las víctimas de violencia sexual denunciar a sus agresores aunque los hechos hayan proscrito.
El rockero, cuyo nombre verdadero es William Bruce Rose, fue acusado por la actriz y modelo estadounidense Sheila Kennedy de agresión sexual ocurrida supuestamente en 1989, cuando el grupo de hard rock estaba en la cima de su éxito.
En la demanda, Sheila Kennedy alega que Rose, actualmente de 61 años, "la agredió sexualmente" en la habitación de un hotel de Nueva York después de haberse conocido en una discoteca.
"Rose utilizó su fama, estatus y poder como celebridad e intérprete en la industria musical para tener acceso a manipular, controlar y agredir violentamente a Kennedy", afirma la denuncia, que pide una reparación económica por los daños "emocionales, físicos, financieros y psicológicos" sufridos.
El compositor y pianista de Guns N’ Roses tenía fama en la industria musical de "agresivo, violento y un comportamiento sexual hostil", según la demanda de 10 páginas presentada electrónicamente este miércoles por los abogados de la modelo, de 61 años.
Kennedy describe que inicialmente había ido a una fiesta en la habitación del hotel del vocalista y pianista del legendario grupo por invitación de éste, pero ante el giro "incómodo e inquietante" de la situación, Kennedy abandonó la habitación con un amigo de Rose.
El artífice de éxitos como "Appetite for Destruction", cuyo verdadero nombre es William Bruce Rose, la siguió y la obligó a regresar arrastrándola "como un hombre de las cavernas" a su cuarto, donde le ató sus manos a la espalda y abusó de ella sexualmente.
Portada en cuatro ocasiones de la revista erótica Penthouse, Kennedy, también de 61 años, asegurá que Rose, que estaba bajo el efecto de las drogas, la "trató como propiedad utilizada para su propio placer sexual".
Kennedy "sintió que no tenía escapatoria y estaba obligada a consentir", según el documento judicial presentado el 22 de noviembre en el Tribunal Supremo del condado de Nueva York.
– Jamie Foxx, también acusado –
Por su parte, Eric Marlon Bishop, más conocido como Jamie Foxx, fue acusado de agredir sexualmente a una mujer, que aparece bajo el nombre genérico de Jane Doe (como se denominan en la justicia las personas que quieren permanecer en el anonimato), en una terraza de un bar restaurante en Manhattan en agosto de 2015 cuando estaba con una amiga.
En la denuncia, Jane Doe, conoció a un Foxx, según ella, pasado de copas, en el restaurante Catch NYC junto con una amiga y le preguntaron si podían hacerse una foto con él.
La mujer asegura que después de hacerse las fotos con el actor la piropeó y empujó a una "zona aislada" donde le habría tocado el pecho antes de deslizar sus manos a sus genitales pese a su resistencia.
Un guardia de seguridad habría presenciado la agresión pero no intervino, según la denunciante. Solo cuando su amiga se acercó a buscarla, Foxx paró de toquetearla y se fue.
El restaurante Catch NYC $ Roof y su propietario Mark Birnbaum son objeto también de la denuncia de la víctima, que entonces tenía 18 años, y que busca una compensación económica por el dolor, el sufrimiento, la angustia emocional, ansiedad y humillación que le produjo la agresión, por la cual asegura que tuvo que recibir tratamiento médico.
Estas denuncias se suman a otra de la artista Cassie, cuyo nombre real es Casandra Ventura, que interpuso la semana pasada una demanda contra el rapero Sean Combs por agresión sexual y violación. Un día después anunciaron un acuerdo económico para zanjar el caso.
Asimismo, Jimmy Iovine, productor de cantantes como Bruce Springsteen, Patti Smith, Tom Petty, Stevie Nicks, cofundador de Beats con Dre, e Interscope, también fue denunciado por agresión sexual.
Todo este rosario de demandas se realizan bajo la ley de Nueva York conocida como Adult Victims Act, que expira este jueves y que permite presentar denuncias de abusos sexuales ya prescritos.
AFP
