Jueves 28 de noviembre de 2024
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¿Se terminó el PSG? La debacle del gran sueño de Qatar

Hace sólo un par de años era habitual apostar a las victorias del PSG en todos los casinos en línea…

¿Se terminó el PSG? La debacle del gran sueño de Qatar
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Hace sólo un par de años era habitual apostar a las victorias del PSG en todos los casinos en línea en México, porque estaba casi asegurada. Con un presupuesto virtualmente ilimitado y una delantera formada por Mbappé, Neymar y Messi, el PSG era sencillamente imbatible, sobre todo cuando los rivales que tenía delante eran el Reims, el Nantes o el Clermont.

Todo comenzó en 2011, cuando el PSG fue adquirido por un fondo de inversión llamado Qatar Sports Investments, o, lo que es lo mismo, por el Gobierno catarí. Esta adquisición dotó al PSG de un flujo de dinero sin obstrucciones procedente de la venta de petróleo de Qatar, es decir, pasó a convertirse de facto en un equipo-Estado.

Al principio, los cataríes tuvieron que conformarse con firmar a jugadores de nivel medio, ya que las grandes estrellas mundiales no querían dar un paso atrás en su carrera para jugar en la Liga Francesa. Pero incluso eso fue suficiente para empezar a ganar la Ligue 1 de manera sistemática desde la temporada 2012-2013 en adelante.

En la temporada 2016-2017, un jovencísimo Kylian Mbappé despuntó como nunca y llevó al Mónaco a levantar el título. La temporada siguiente, el PSG compró a Mbappé por 180 millones, y, de paso, a Neymar por 222. Los dos traspasos más caros de la historia del fútbol, en un mismo verano. Y la Uefa, entretanto, mirando para otro lado.

La inversión tan formidable de Qatar en el PSG tenía un objetivo claro: ganar la Champions League, y, preferiblemente, ganarla antes del Mundial de Qatar de 2022. La Ligue 1 se daba por sentada, y, a pesar de todo, el PSG volvió a perderla en la temporada 2020-2021 ante el Lille. ¿La reacción de Qatar? Fichar a Messi para reunir a una delantera invencible.

El PSG consiguió ganar la Ligue 1 durante las dos temporadas de Messi en París, pero esto no fue suficiente. Con una delantera tan formidable, el objetivo era ganar la Champions, el gran trofeo continental europeo. Sin embargo, el PSG nunca fue capaz de levantarla, ni siquiera reuniendo a los dos mejores delanteros del momento y a Neymar.

El fin del contrato de Messi llegó el pasado verano, seis meses después del Mundial de Qatar. La marcha del astro argentino coincidió también con la venta de Neymar al Al-Hilal de la Liga Saudí. Y el propio PSG hizo lo imposible para tratar de vender a Mbappé este mismo verano, algo ante lo que la estrella francesa se negó porque le falta un año para irse a coste cero.

Pese a que el PSG invirtió en traer a Dembélé del Barcelona, a Ugarte del Sporting, y a Kolo Muani del Frakfurt, lo cierto es que Dembélé es mucho peor que Messi, Ugarte está lejos de Verratti y Kolo Muani tiene mucho trabajo por delante si quiere hacer olvidar a Neymar. La inversión del club está siendo, a todas luces, mucho más laxa que en la última década.

Con un Mbappé que tiene la mente más puesta en Madrid que en París, los resultados del PSG están dejando bastante que desear en este comienzo de temporada. Actualmente, los parisinos están en quinta posición con solo ocho puntos y apenas dos victorias, por detrás del Nice, el Marseille, el Brest y el Mónaco, que lidera la tabla.

Los tropiezos del PSG ni siquiera pueden achacarse a un periodo de adaptación de su nuevo DT, el español Luis Enrique. El más reciente tuvo lugar hace solo unos días ante el propio Nice, y, además, se produjo en casa. Una derrota que viene a abrir una crisis anunciada a gritos en un equipo que, a todas luces, se encuentra cada vez más en descomposición.

El juguete de Qatar parece que desiste definitivamente de levantar la Champions, y, en lo sucesivo, se conformará con competir más o menos dignamente en la Ligue 1, sin grandes extravagancias. Además, el PSG está perdiendo su atractivo económico para los jugadores más interesados en engrosar su billetera, porque ahora tiene un competidor mayor: Arabia Saudí.

El Gobierno saudí decidió hace unos años dar un giro a sus antiguas políticas conservacionistas. Los ingresos de los petrodólares parece que irán menguando en los próximos años, y Arabia Saudí necesita reinventarse. Proyectos como The Line, la torre Jeddah, nuevas redes ferroviarias y una Liga de fútbol milmillonaria empiezan a brotar con fuerza en el país saudí.

El resultado es el desembarco de grandes estrellas como Cristiano Ronaldo, Neymar, Verratti, Benzema, Kanté, Koulibaly o Milinkovic-Savic, entre muchos otros jugadores. Y esto parece que acaba de empezar. La temporada próxima serán muchos más, y al Gobierno saudí parece que no le temblará el pulso a la hora de pujar. ¿Estamos ante el fin de una era en el PSG?

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